Cuidando de Ti. Asociación de Cuidadores SB colabora en la formación de más de cien cuidadoras profesionales de AIUDO

El pasado mes de julio, nuestra presidenta Sara Suárez, Técnica en Cuidados Auxiliares de Enfermería con más de 30 años de experiencia en el cuidado de personas en situación de dependencia, colaboró con nuestros amigos y colaboradores desde hace años de Aiudo en un webinar bajo el título “Úlceras por presión. La epidemia bajo las sábanas”, formando en prevención de úlceras por presión a más de un centenar de sus cuidadoras. Una formación de gran relevancia dentro del mundo de los cuidados de personas mayores que provocó un gran interés entre las asistentes, las cuales tuvieron la oportunidad de realizar numerosas preguntas relacionadas con estos cuidados: cómo actuar en situaciones específicas; cuidados de la piel en las personas mayores; dispositivos y ayudas técnicas recomendables según la dolencia del mayor; o preguntas que derivaron a trucos prácticos, consejos, recomendaciones que corrigieron malos hábitos adquiridos e incluso el derribo de algún que otro mito, lo que alargó esta sesión a más de dos horas.

Os dejamos información resumida de esta formación 

“Úlceras por presión. La epidemia bajo las sábanas”

La sesión formativa empezó dejando claro dos conceptos muy importantes:

  • Primero, que el 95% de las UPP se pueden evitar. Esto quiere decir que todos nosotros podemos hacer mucho para que estas lesiones no aparezcan.
  • Y, en segundo lugar, que este tipo de lesiones no están relacionadas exclusivamente con la edad, es decir, son lesiones que pueden desarrollarse tanto en personas mayores como en cualquier persona de otra edad que, en un momento determinado de su vida, se vea expuesta a una disminución de su movilidad o a la dependencia total, pudiendo ser esta una situación de manera temporal o permanente. 

A pesar de esto, debemos tener en cuenta que hay otro tipo de factores que influyen directamente en la aparición de las úlceras por presión como pueden ser las patologías propias de la persona, la incontinencia, el nivel de consciencia, la movilidad o la nutrición, entre otras.

 ¿Qué son las úlceras por presión y donde se localizan? 

Una úlcera por presión es una lesión localizada en la piel o en tejido más profundo, por lo general sobre una prominencia ósea, producida por la presión prolongada o fricción entre dos planos duros: la cama o silla y el hueso. 

Respecto a su localización, cabe decir que, según estudios realizados, el 80% de las úlceras por presión se localizan en la zona del sacro y los talones, pero como se puede observar en la imagen, hay otras zonas del cuerpo en las que también pueden aparecer estas lesiones según la posición que adopte la persona.

Además de tener en cuenta todo esto, Sara explicó a las asistentes la importancia de una ecuación muy fácil de entender: Tiempo + Presión = Úlcera Por Presión. Esto significa que mantener una presión determinada durante un determinado tiempo aumenta el riesgo de desarrollar este tipo de lesiones. 

Las úlceras por presión se clasifican en cuatro categorías según la profundidad que afecte a los tejidos: 

  • Categoría I: enrojecimiento de la piel que no blanquea.
  • Categoría II: pérdida de espesor parcial de la dermis.
  • Categoría III: pérdida total del grosor de la piel.
  • Categoría VI: pérdida total del espesor del tejido con hueso, tendón o músculo expuesto.

Prevención de las Úlceras Por Presión 

El objetivo principal de este Webinar organizado por Aiudo fue el de ofrecer a todas sus cuidadoras una formación con la que ampliar conocimientos sobre este tipo de lesiones, desarrollando con ello habilidades que les permitan mejorar la prevención de las úlceras por presión y, de esta manera, conseguir la mejora diaria de los cuidados que ofrecen a las personas mayores.

La actividad preventiva recomendada en esta formación se ha basado principalmente en dos intervenciones clave: los cuidados de la piel y el manejo de la presión. 

Sobre los cuidados de la piel, la principal intervención es la inspección diaria con la que observar cualquier cambio de coloración en la piel o aparición de heridas. Diariamente, se recomienda seguir un protocolo de higiene para mantener la piel limpia que incluya el uso de jabones no irritantes, así como el especial secado de las zonas tras el lavado y el descarte de aquellos productos que contengan alcohol.  

Tras la higiene, es de gran importancia mantener la piel en condiciones óptimas mediante una buena hidratación con cremas hidratantes, teniendo en cuenta no hidratar en exceso aquellas zonas que ya están expuestas a la humedad y haciendo hincapié en aquellos puntos de gran riesgo que hemos mencionado anteriormente. Para estas zonas se recomiendan aceites especiales aplicados mediante ligeros masajes tres veces al día.

Por otra parte, el tema del manejo de la presión es esencial para aliviar esas zonas de riesgo expuestas a una presión continua. Para ello, se recomendó a las asistentes llevar a cabo un programa de cambios posturales en las personas dependientes o con movilidad limitada de manera constante, evitando durante esta técnica el arrastre de la persona y, sobre todo, evitando el contacto directo entre prominencias óseas.  

Para proteger zonas de alto riesgo como los talones, la zona entre las rodillas o incluso en el sacro, es recomendable utilizar protecciones locales (como taloneras), o almohadas y cojines que nos ayuden a mantener a la persona encamada lo más cómoda posible, evitando de esta manera la presión continuada


Protección local (Talonera)

Otra de las medidas de prevención importante de la que se habló mucho en esta formación fue la de mantener una alimentación adecuada, un tema que dio pie a muchas preguntas entre las cuidadoras, tras afirmar nuestra presidenta que la desnutrición en las personas aumenta significativamente el riesgo de aparición de úlceras por presión y dificulta el proceso de cicatrización.

Como tratamiento para este tipo de heridas, Sara advirtió firmemente que la Prevención es el mejor tratamiento, aunque llegado el caso de que aparezca alguna de estas heridas, debemos comunicarlo en primer lugar a la familia y, posteriormente, al servicio de enfermería de su centro de referencia para que el personal sanitario cualificado decida su tratamiento y curas teniendo en cuenta el tipo de lesión y su gravedad.

Sin duda alguna, para Cuidando de Ti la formación de las personas cuidadoras es de gran importancia, de hecho, parte de nuestro proyecto #CuidarEnCasa se basa en la formación en cuidados y autocuidado de las personas y familias cuidadoras, aquellas que se hacen cargo de los cuidados diarios de un familiar en situación de dependencia.  Pero también sabemos por experiencia que, muchas de estas familias precisan de un apoyo externo como el de una cuidadora profesional para llevar a cabo todos estos cuidados diarios, permitiéndoles de esta manera continuar con su decisión de mantener a la persona dependiente en el propio domicilio o respetando la propia decisión de la persona dependiente de continuar viviendo en su hogar. 

Es por ello que, consideramos de igual importancia poder formar además de a todas aquellas familias interesadas, a todas estas personas cuidadoras profesionales como las de la plantilla de Aiudo, garantizando de esta manera que los cuidados que se ofrecen a las personas mayores o en situación de dependencia se realicen con mayor seguridad y de manera profesional, es decir, que sean unos cuidados de mayor calidad.

Bibliografía

  • https://gneaupp.info/wp-content/uploads/2020/08/Paniagua-2020.-LRD.-Prevencio%CC%81n-clasificacio%CC%81n-y-categorizacio%CC%81n.pdf
  • http://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/guiasclinicas/104GRR.pdf