¡¡Ay que calor!!

¡¡Ay que calor!!

Estamos en verano y si algo lo caracteriza es el aumento de la temperatura y con ello la posibilidad de padecer un golpe de calor.

Cualquiera de nosotros podemos sufrir un golpe de calor, sin embargo la población infantil, las personas mayores de 65 años y personas con enfermedades crónicas son más propensas a experimentarlo.

 ¿Golpe de calor? ¿Y eso qué es?

Un golpe de calor o también llamado hipertermia es el aumento de la temperatura corporal por una exposición prolongada al sol o bien por realizar ejercicio físico en ambientes calurosos.

Cuando esto ocurre, el cuerpo intenta regular su temperatura a través de sus propios mecanismos como la sudoración y la vasodilatación periférica,  por lo que la piel expulsa mucho líquido y el cuerpo empieza a deshidratarse, provocando además un aumento de  la temperatura corporal que puede superar los 40ºC.

Este aumento de la temperatura altera el sistema nervioso y provoca el fallo de algunas funciones de nuestros órganos internos.

Factores de Riesgo: 

  • Envejecimiento (modifica la percepción de la temperatura corporal y percepción de la sensación de sed)
  • Deterioro Cognitivo
  • Dificultad para la comunicación
  • Patologías Crónicas
  • Algunos medicamentos (diuréticos, psicofármacos, beta-bloqueantes, anti-histamínicos…)
  • Obesidad
  • Edad infantil

Síntomas :

  • Mareo
  • Sudor excesivo al inicio y falta de sudor posteriormente
  • Piel seca y roja
  • Fiebre
  • Ritmo cardíaco acelerado
  • Dolor de cabeza
  • Calambres musculares en brazos, piernas, abdomen (por la pérdida de agua y electrolitos)
  • Sensación de excesivo cansancio.
  • Sequedad en la boca.
  • Enrojecimiento de la piel.
  • Hiperventilación.
  • Disminución de la orina
  • Pérdida del conocimiento
  • Vómitos
  • Problemas de respiración
  • Desorientación-confusión mental

Tratamiento:

  • Llevar a la persona a un sitio fresco o con sombra y poner los pies en alto para favorecer la circulación de sangre
  • Disminuir la temperatura corporal con paños de tela mojada en las axilas.
  • Si la persona tiene una temperatura superior a los 40ºC, bañarla con agua fría hasta que se rebaje a los 38ºC.
  • Controlar la temperatura cada 15 minutos para continuar con los tratamientos fríos si fuera necesario.
  • Colocar las muñecas bajo un chorro de agua para proporcionar alivio.
  • No quitar prendas de ropa, pero si aflojarlas para disminuir la sensación de agobio sin que se escape la humedad del cuerpo.

Prevención:

  • Beber mucho líquido ( se debe consumir frecuentemente agua, infusiones, zumos de frutas, aunque no se tenga la sensación de sed y evitar el consumo de bebidas alcohólicas así como té y/o café)
  • Vestir con ropa ligera. No se recomiendan fibras acrílicas pues dificultan la transpiración, mejor algodón y colores claros.
  • Uso de sombreros/ gorras
  • Dieta ligera (ensaladas, frutas y verduras)
  • Evitar actividad física en las horas más calurosas del día.
  • Evitar la exposición al sol  sobre todo en las horas de mayor intensidad (12-16 horas) y con una humedad relativa alta (mayor del 60%).
  • Mantener la casa fresca y ventilada.